Pablo Bustos, presidente de la Red de Veedurías de Colombia, ha sido amenazado de muerte según denunció la organización que dirige. Las amenazas provienen de organizaciones criminales que buscan silenciar las acciones de la Red en la representación judicial de víctimas de masacres, las cuales incluyen cerca de 700 víctimas y 150 homicidios. La labor de la Red de Veedurías ha sido crucial para defender los derechos de estas víctimas, muchas de las cuales han sufrido violaciones graves a sus derechos humanos.
A pesar de las amenazas, Bustos ha continuado exigiendo justicia y acción oportuna por parte de la Fiscalía General de la Nación. La posible liberación de los hermanos Borré Barreto, quienes han confesado 700 crímenes, por vencimiento de términos, ha intensificado la preocupación. Bustos ha denunciado la falta de avances en el proceso judicial, señalando que la Fiscalía ha dejado en la impunidad más de 500 homicidios confesos.
“El hecho de que la Fiscalía haya manejado este proceso durante casi 10 años sin resolución y busque mantenerlo reservado, mientras acusa solo una fracción de los homicidios confesos, es inaceptable y promueve la impunidad”, declaró Bustos.
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